lunes, 30 de agosto de 2010

Cresta de los Besiberris.

En un verano marcado por la practicamente inactividad montañera, tengo la oportunidad de escaparme dos días a realizar una de las clásicas crestas de los Pirineos, la Cresta de los Besiberris. Como compañeros cuento con el Sr. Galdrán y con Pablo, que opta por no acompañarnos a los Besiberris pero si nos encontramos con el en la cumbre del Comaloforno.

Arriba y abajo mis compañeros se preparan para comenzar la aproximación.




Nosotros salimos de la presa de Cavallers a eso de las 17'45, y tras bordear la presa y subir por el costado izquierda de esta, por un torrente de agua, llegamos a la zona de los vivacs, al estany de malavesina, unas 2h15' después. La estancia allí fue algo increíble, increíbles vistas del Punta Alta, de la primera parte de la cresta, una luna llena que nos iluminaba, y una buena compañía. Prepararnos las mochilas para el día siguiente y tras disfrutar de nuestra estancia para una noche nos disponemos a cenar. Pronto a la cama que mañana se madruga.

Torrente de agua por el que subimos a los vivacs.

Ramón y Pablo en la zona de vivacs.

El cresterio del fondo, la primera parte de la Cresta de los Besiberris.

Arriba y abajo el Estany de Malavesina y el Punta Alta.

A las 5'00 suena el despertador, poco de remoloneo, cereales un té templado y a comenzar la subida. A la derecha del Estany sale una torrentera y a la izquierda de esta el camino de endereza hacia arriba por una fuerte pendiente que va en dos direcciones, a la derecha hacia el coyado donde hace años había un refugio de chapa y hacia la izquierda en dirección al Besiberri norte, nosotros cogemos la segunda. En 1h15' nos encontramos en la parte baja de este, pensamos por donde subir y decidimos atacarle recto, sabemos que se puede hacer por derecha, mas sencillo, pero recto no nos parece difícil, así que hacia allá que vamos. Decidimos comenzar sin encordarnos, y comenzamos a trepar por bloques, canales...vamos tratando de no perdernos en ese mar de granito y en eso de 30' comenzamos a vernos cerca de la cumbre. LLegamos a la arista de la derecha y divisamos un espectacular mar de nubes que hace que sepamos que es ahí donde queremos estar en ese preciso momento, sufrimos, con el amanecer a nuestra espalda, esa sensación de amor por la montaña, esa sensación de libertad, esa sensación que provoca la necesidad de repetir una y otra vez el regreso a los montes. Alguna trepada más y nos encontramos en el Besibberi del norte (3014m).
Ahora si, decidimos ponernos los arneses por lo que pueda venir a partir de ahora. Sin saber que la trepada más difícil ya está hecha.
Amanecer que queda a nuestras espaldas.

Mar de nubes desde la arista cimera.
A partir de este punto seguimos a tramos siguiendo unos hitos por la parte oeste, en ocasiones trepando por un mar de bloques que dan acceso a agujas sin nombre, que yo conozca al menos. Encontramos trepadas sencillas pero encantadoras y algunas lineas de rápeles y destrepes. La cresta no es difícil de seguir, lo que si es difícil es saber en ocasiones en que punto te encuentras, no por ello dejamos de disfrutar y dándonos igual el nombre de las cosas, continuamos escalando y disfrutando de cada paso, de cada encontronazo con las águilas, de cada minuto de silencio...
La actividad la vamos realizando si descanso y llegados a un coyado nos damos cuenta que la cresta la estamos terminando y que tan solo nos queda el Besiberri del sud y el Comaloforno, que es una cumbre que se puede alcanzar si alargas la cresta.
La trepada al Besiberri sud (1017m) la hacemos por una evidente canal de roca entre buena y mediocre según por donde vayas, sin ser difícil hay que llevar cuidado de que es lo que tocas y donde pones los pies. En esta cumbre la alegría es inevitable, las vistas del todo el Pirineo algo espectacular y de lejos nos encontramos con Pablo que ya se encuentra esperándonos en el Comaloforno.
Sección de cresta.
La subida al Comaloforno (3033m) desde el Besiberri del Sud se hace comenzando por la vertiente oeste en un principio luego por la norte para volver a la cara oeste. Continua con la misma tónica de la cresta, hitos en ocasiones para no embarcarse en exceso, y con algunos pasillos de llevar cuidado. A las 12'30 nos encontramos con Pablo en la cumbre, disfrutamos unos minutos de ella mientras nos quitamos la ferralla que llevamos colgando y que tan solo hemos empleado en un largo de cuerda, y nos disponemos a bajar.
Sección de cresta.

Ramón en la cumbre del Besiberri del Sud (1017m).
La bajada comienza por donde se asciende y al llegar a un coyado tomarlo en dirección este, donde se ve un evidente y desgastadísimo camino. Da camino a un bosque de piedras donde comienza el verdadero infierno del día. La bajada se realiza por un bosque de bloques, donde a cada paso hay que cambiar de bloque, rodear neveros, rodear cortados, seguir por los bloques, rodear más cortados.. y todo ello con algo de cansancio del todo el día sin parar. Al llegar a los vivacs realizamos el único descanso un poco más largo, rehacer las mochilas con el material que habíamos dejado escondido, comer algo, beber, un cigarreto con los pies en el lago y a continuar la bajada por donde ayer subimos.


Actividad: Cresta de los Besiberris + Comaloforno.
Dificultad: Sencilla si se mueve uno bien por estos terrenos.
Horario: 12h30' desde el comienzo de la actividad hasta el coche. Si se busca hacer en el día se deberán de sumar un par de horas más, aunque se vaya a ir menos cargado de que íbamos nosotros.
Opinión personal; recomendable.

lunes, 16 de agosto de 2010

Mantis Religiosa

Os muestro una bonita imagen de una Mantis Religiosa en la barandilla del "Espazo Ceibe". Normalmente esta especie suele encontrarse en un color más verduzco, aunque parece ser que adoptan el color de la hierba en la que viven. Quizás por encontrarse lejos de la hierva es por lo que tiene este aspecto blanquecino, os aseguro qua la foto no ha sufrido ningún retoque digital.

Mantis en el Espazo Ceibe.

También se cuenta que la Mantis hembra tiene como costumbre comerse al macho tras el apareamiento, jejeje.
En fin, espero que guste la foto!!!!

lunes, 26 de julio de 2010

acercanientos!!!!

Tras un mes marcado por la inactividad, producida por cambiar mi "closca de caragol" de ua ciudad a un pueblo, y por tener que reparar las cienes y cienes de cosas de mi nueva "closca de caragol", la semana anterior pude realizar algunos acercamientos a diferentes actividades, algunas de ellas cercanas a mi nuevo refugio, y todas ellas de caracter bien diferente.

Nuestro Refugio el "Es-Pazo Ceibe".

El lunes suena el movil o oigo al Maño decir, "ei tio, operación fondo de bikini o qué??". Pues no se diga más, quedamos a las 19'00 en el cruce de torremanzanas y allí que nos dirigimos. Me enseña casi todo el sector, probamos de abrir varios bloques, tanteamos por aquí y por allá y abrimos "integral al guyairimi". Mas tarde vamos a otro bloque cuyo nombre no recuerdo pero que sale más abajo en las fotos, tremendo techo de dedos y saber colocarse, guapísimo...

Ramón de vuelta en Aspe.

Javi saliendo del techo de "...,6b+".

Javi debajo del techaco del Fondo de Bikini.
El martes y aprovechando que había que hacer mudanza en Elche, decidimos aprovechar el viaje y visitar la escuelita que hay en Aspe, perfecta para rodar y para que el Sr. Vicento vuelva a empezar después de meses encerrado con sus libros. Ramón también se apunta a esta excursioncilla y realizamos varios 6b+ clásicos de la zona, mientras Vicento rueda en los IV y se encarbiza en "Herbes màgiques, 6b".
Maño en el techo, ¿donde está su mano izquierda?

Javi en la mencionada "integral al guyairimi".
Y el viernes Ramón y yo nos acercamos al Cabeçò a adentrarnos en la Cresta de las Jotas, pero esta crónica deberá esperar a ver si le robo las fotos para poder colgar alguna, decir solo que es una actividad muy guapa y muy montañera, autoprotección, grado asequible, bloques sueltos...muy guapa, y donde terminamos tomando cerveza en el "Es-pazo Ceibe".
Saludos y hasta pronto!!!!!!!!!!!!!!

domingo, 4 de julio de 2010

Cresta de la Foradà,IV

Mañanita de domingo veraniego y como entreno para ... y para vernos el Ramón y yo, que ya hacía que no nos uníamos la cuerda juntos, optamos por la Cresta de la Foradà.
Madrugamos lo justo y un cielo cubierto de nubes presagia una buena mañana sin el sol que puede hacer que nos torremos en la cresta.
Ramón me deja el honor de ir todo el rato por delante, el ya ha hecho la cresta y este es su regalo de hoy. La cresta la hacemos en su mayoría en ensamble, optando por asegurarnos tan solo en los momentos más críticos, que son el comienzo, algún destrepe más que descompuesto y un resalte a mitad de la cresta.
En cuanto al grado y al equipamiento decir que, cuenta con tres o cuatro cordinos a lo largo de la vía, tres o cuatro argollas y una línea de rápeles al final de la cresta.
Me parece una actividad divertida y que hay que hacer, es una cresta por donde escalamos un montón de días al año en sus vertientes sur y norte, y que la verdad, también está muy bien conocerla en su línea de cresta por arriba, los paisajes son increibles, el Maigmo, el Cid... en fin, actividad "facile e divertente pera tuti la familia"


Ramón aproximámdose a la Cresta.

Javi en los incorporándose a la cresta.
Javi ladeando la cresta.

Con la cresta entre las piernas.

Con el Cid al fondo y un resalte a las espaldas.

Recogiendo cuerda...

Ramón con todo el paisaje al fondo ya terminada la actividad de hoy.

miércoles, 23 de junio de 2010

Bastoneo-trote por Barranc dels Tarongers

Ayer, después de mucho tiempo sin correr por el monte y puesto que un compromiso familiar me lleva a pasar unas horas en Ontinyent, decido ir a correr un poquillo. A las 16'30, con todo el solapio pegándome en el cogote cojo agua de la fuente y comienzo el trote por el fabuloso Barranc del Tarongers. Paso por los diversos sectores de escalada, Patiràs, alta tensión, llego al molino... voy entre trote y bastoneo, me siento a gusto, no se donde voy y son para mi parajes nuevos, una vez pasado el molino. Las vistas espectaculares, nada que envidiar a otras zonas de la peninsula, un verde vivo, paredes por todos lados, impresionante este rinconcillo valenciano. Tras una subida que no ha cesado desde la salida, miro adelante y veo que me encuentro cerca de Bocairent, y me digo, ¿¿por qué no llegar hasta allí?? Llego al puente y solo llevo 50', así que me decido a subir al mirador donde se encuentra una ermita, donde nunca antes había subido, no sin antes dar unas vueltas por el pueblo buscando el camino de acceso. La bajada es un poco más catastrófica, para coger un atajo me veo en la orilla del rio, como está llenísimo de vegetación, me toca subir por donde puedo y llego casi a la puerta de les covetes de los moros, camino y hacia abajo hasta casi el rio, otra vez hacia arriba siguiendo el camino y otra vez en el pueblo. Entre perderme y enmierdarme llevo ya cuando salgo del pueblo 1h40. La vuelta debe de ser más rápida, o eso pienso, pero eso de investigar volver por donde no había sido la ida me hace volver a perderme en dos ocasiones más. Total que tras 2h40' llego a la furgo derrotao, sudado hasta donde no sabía que se sudaba y muerto de calor...como recompensa me doy un baño en el pou clar (bellísimas pozas)!!!!
Increible esto de descubrir nuevas zonas donde correr!!!!!!!!!!!! Lolo apuntate esta que la zona es guapísima, sin grandes desniveles pero muy gaupos, de verdad!!!!
No hay fotos porque no caí en llevar la cámara!!

martes, 15 de junio de 2010

¿¿estamos locos o qué??

Este domingo, animados por una amenazadora lluvia en el vinalopó y por que los hay que están majaras perdidos me veo empujado a acudir a creviblok, ¡en junio!! ?estamos locos o qué?? Lo que paracía que iba a ser una jornada de sombra, se convierte en una tarde de lujo, con un sol que quemaba, unos romos y regletas sobadísimas, y los clásicos mosquitos del bancal... eso si, fue una gran tarde, lo pasamos de lujo e hicimos unos cuantos bloques para todos los gustos.
La compañía; el negro y el carlos, y a última hora los locales del castillo de san fernando.
Algunos de los bloques que hicimos y otros que probamos; Travessia rizzo 6a+, El gurú 6b, un par de quintos en este mismo bloque, Currumimi variante alicantina 6b/+, Xe justet ahuí 6b+, A carn viva 6a+, una trave que hay arriba de 6a, y bueno un par de variantes que hay por ahí, sin nombre ni grado y muy guapas también.

El negro y el carlos descansando en una pequeña sombra.
Nuestra mejor compañía; Té.

Negrus Fotograficus.

El Negro en la miniregleta de" Xe justet ahui, 6b+".

Las manos del Nego, resbalándose de esa regleta.
Me despido ya, con terribles ansias de cuerda...yeeahhhhh!!!!!!!!!!!!!

viernes, 4 de junio de 2010

Lo que nunca debería haber existido.

El fin de semana pasado tocaba viajar más lejos que de costumbre, a Polonia. Como visita cultural escogimos el campo de exterminio de Auswich.

Poco tengo que decir, pues una vez pasas por la barrera de entrada, bajo el lema "El trabajo os hará libres" sobran las palabras. Los pasos se ralentizan, sobran las palabras, las miradas se derrumban y se hacen tristes, no se puede mirar a los ojos a las personas, pues en más de una los ojos se vuelven de un brillante cristalino, aquel que precede a las lágrimas.

Hemos visitado un lugar que nunca debería haber existido, pero una vez que la conciencia humana es capaz de crear espacios donde el raciocinio se torna de un color tan oscuro que se asemeja a la vergüenza, no está de más que estos lugares se conserven, para que seamos conscientes de lo que ciertas personas han sido capaces de crear, y con el fin de que en la historia no se repitan por más estos horrores.

"Arbeit Macht Frei" (el trabajo os hará libres), frase lapidaria que da entrada al Campo de Auswich.


Uno de los focos de iluminación de una torreta de vigilancia.

Pasos de las vías del tren, con barracones a los lados.

Hileras interminables de barracones.

Una de las alambradas electrificadas.

Tristes calles llenas de barracones.

Una de las puertas...

"La carretera de la muerte".

El bloque 24 es un número más, no es el último número de los cienes de barracones que nunca deberían haber existido.

domingo, 2 de mayo de 2010

UTMDA, 82Km, 4500+

Esto es una historia larga que trataré de relatar para los más osados a leer largo y tendido. Hace dos años, el día antes de un viaje a Pirineos con el colega Galdrán, salgo a trotar un ratillo, bastante poco para lo que estoy acostumbrado, y cosas del destino me fastidio la rodilla, lo que hace que la bajada del Tuc de Mulleres (3010m) se convierta en un verdadero infierno. Desde entonces y hasta hace poco más de un año y medio no he sido capaz de corretear más de 30' seguidos sin sufrir pinchazos en mi maltrecha rodilla, con lo que eso suponía para mi. Este año, cansado de este estado de salud, me propuse volver a correr costase lo que costase y para tal fin me planteo motivarme con la Marathó i mitja del Penyagolosa, lo que me va a suponer ponerme en forma, fortalecer la rodilla y sufrir a saco. Cuando se lo planteo al Lolo, me comenta de una carrera, primera edición y en nuestra espectacular zona de Valle de Guadalest, Beniarrés, Agres, Alcoy...sin quererlo él, y sin saberlo yo, me introduce el veneno para plantearme el Trail Mitja LLuna, 82Km y 4500 metros de desnivel positivo.

El Lolo, con su dorsal para la Ultra Trail de les Muntanyes d'alacant, 160Km y 800om+.

Comienzo a tratar de trotar y de fortalecer mis rodillas, series de subidas al castillo de Santa Barbara en la bici antes de ir al roco, carreras cortas, series en bici donde solo vale el plato grande y piñón pequeño. También participo, en modo caminante al KM Vertical del Puig Campana, donde en la bajada mi rodilla se resiente bastante. Esto no hace que me desmotive, mi cabeza siga intacta, y continuo con el entrenamiento previsto.

Ramiro y yo recogiendo las dorsales para la carrera la noche previa a la gran cita.

Yo sonriente con mi dorsal 199, para mi estar aquí ya es un motivo de alegría.

Se suceden los meses y mis entrenamientos se hacen cada día más austeros, carreras cada dos días, series en la bici donde continuo con la medicina de no bajar del plato grande y del piñón pequeño. Esto evidentemente lo combino con no dejar de escalar.
Mi cuerpo me permite cada vez carreras más largas, 1h30' por asfalto combinando cuestas. Y es entonces cuando comienzo a trotar por el monte, donde el Cabeçò ha sido mi gran aliado. Me dedico a realizar series al Cabeçò, trotes largos de hasta 3h30', y sobre todo observo una gran mejoría, la rodilla no sufre y mis músculos tampoco. Mi estado mejora y me encuentro mucho mejor que cuando me dedicaba a hacer medias marathones de montaña. Pero convivo con la duda, ¿¿seré capaz de conseguir mi primera ultra??

En la línea de salida en Guadalest.

Se suceden sin parar los entrenamientos, casi siempre solo, lo que lo hace mucho más duro, así recuerdo con especial cariño mis únicos tres entrenos acompañado, dos con el Lolo y uno con Javiño con las Islas Cies como telón de fondo. Lo más importante, ni un solo dolor en la rodilla, no hay molestias, nada de lo que poder quejarme...mi entreno va como la seda aunque se que no puedo descuidarme.

Pero ayysss, a pocos días comienan los fallos. Mis zapatillas nuevas, esas que hace pocos días me hicieron unas ampollas de esas que hay que vaciar con jeringuilla, me regalan un pequeño dolor plantar un día que termino un entreno en el Ponoig, dolor que aparece con tan solo dos km de carretera. Quedan solo tres semanas para la carrera y no quiero pensar que estas zapatillas me permiten volar por el monte pero me destrozan al tocar el asfalto, me niego a pensar eso, y le echo la culpa de mi dolor a no se que extrañas causas. Cuestión que pagaría mas tarde, pero eso yo no lo sabía...

En la presa del embalse de Guadalest con Serrella al fondo.

Las semanas anteriores a la carrera se suceden de una actividad cada vez más pausada para llegar descansado y de unos nervios cada vez más difíciles de controlar. Y que decir de los días anteriores, la cabeza solo da vueltas a lo mismo, me imagino la línea de salida, la línea de meta, las cuestas interminables, los rompepiernas, la lucha de haber superado una lesión de rodilla, de verme capaz de correr durante tiempos que hace 5 meses eran francamente imposibles para mi rodilla, cada día que me he obligado a entrenar a pesar de encontarme cansado, desmotivado, sin ganas, y en el fondo, lo que he disfrutado de cada minuto de entrenamiento, las incontables vueltas al hipódromo, el plato grande de la bici echando humo, mi estimado cabeçò, el puig campana, el ponoig, las cervezas de después en casita...

Y por fin llega el día antes de la carrera...

Ramiro, uno de los triunfadores de la jornada y mi compañero.

El viernes mis nervios no me dejan tranquilo, ni siesta, ni nada, solo quiero correr. A las 20'00 quedo con Ramiro en San Juan, se me olvida la comida en casa, lo que provoca en descojono de la Tamara, que nos anima antes de partir hacia el infierno. Llegamos a Alcoy a buena hora, nos encontramos con el Lolo, que parece haber terminado con las existencias de todo el café de colombia a pesar de prometer que no ha tomado ni un cortado. Vemos a Jaime, el TITAN de los titanes. Recogemos los dorsales, nos damos un paseo y a las 23'00 vemos salir y animamos a los compañeros de la ultra de 160km, que van, sin saberlo, camino del infierno. Hora de ir a la furgo, tres platos de pasta vegeta, infusión y a la 01'00 nos vamos a dormir, cuestión que no conseguimos, pero si por lo menos descansar algo. 04'30 escuchamos las primeras voces fuera de la furgo. 05'00, los de la ultra llevan 6h corriendo, nosotros desayunamos pasta y bocadillos y nos vamos a coger el autobús. 06'00 autobús para Guadalest, en el cual ni dormimos ni descansamos, ni podemos tener los ojos abiertos ni cerrados; son muchos meses esperando este momento. 07'20 llegamos a Guadalest, paseo, ponerse crema, respirar el ambientillo y a las 08'00 comienza la carrera, no exenta de avisos de que el día va a ser un desastre.

Nubes al fondo.

La Carrera.
Con un ambiente ultrafanático damos la salida con una cuenta atrás entre todos. Ramiro y yo nos colocamos a media carrera y comenzamos a dar la vuelta a Guadalest camino del pantano. Al poco tiempo se me cae un bidón al suelo, ¡me cago en la mar, esto no estaba previsto! Paro, me agacho, lo pongo en el sitio, la gente nos pasa, pero no pasa nada. Seguimos corriendo cuesta abajo, y vuelve a caerse el bidón, paramos, Ramiro me lo coloca, la gente nos pasa. Esperemos que esta sea la última vez. Más adelante vuelve a caerse el bidón, comienzo a desesperarme, nos descojonamos, cambio la ubicación, bidón a la riñonera y chubasquero al portabidones. Volvemos a correr. Vuelve a caerse al chubasquero, esto es para mear y no echar gota, consigo que quepa todo en la riñonera y así no se caerá nada. Proseguimos con el "trote cochinero", y caminando rápido cuando la pendiente se eleva, todo por asfalto. Ramiro decide sacar los bastones para ir haciéndose con ellos y sorpresa, uno de ellos no se abre, así que viene una lucha para conseguir abrirlo, y tras bastante rato lo conseguimos, con lo que volvemos a "cochinear". Para entonces comienza un dolor en mi planta del pie, ¡me cago en la mar!, seguimos pero el dolor se hace más intenso aunque trato de no preocupar a Ramiro. Parece que va a ser un día duro. Consigo un truco para que no me duela, recoger el dedo gordo, con la incomodidad que esto supone, a lo que se le suma que esto hace que me salga una ampolla en el meñique. ¡De lujo!! voy hecho un desastre a las 5km de carrera, pero bien, solo quedan 77km.
A los 12km mis pies están destrozados, dolor plantar y ampollas en los meñiques, me cago también en mis calcetines de correr nuevos, con lo bien que estaba yo con los del carrefur a 10 pares 5 euros!!!!
Prosigue la carrera, tremendas subidas, calorcillo, pero me siento a gusto, motivado y fuerte. Fuerte, que gran trampa. Llega el momento de las bajadas, se suceden los subi-bajas y olvido que debo de llevar cuidado con mi rodilla, el paisaje es increíble, y no me importan mis dolores ni mis ampollas, a pesar de haber parado en dos ocasiones, una para untar mis pies en vaselina y la otra para untar mi planta en radio salil.
Pero llega el mal paso, en una de las bajadas más técnicas doy un mal paso mi rodilla hace el movimiento que no debe de hacer y una pinzada recorre mi rodilla izquierda. No lo quiero ver, pero cuando esto pasa los dolores van a ser cada vez más cercanos en el tiempo, y así es. Consigo subir a buen ritmo, "cochinear" en llano, pero en otra bajada la rodilla vuelve a recordar que empieza a resentirse, me duele a cada paso, a cada apoyo, a cada giro.
Me encuentro con mi hermano que anda de senderismo y haciendo fotos en compañía de Bojco y Román. Ramiro y él se saludan tras más de 20 años sin verse. Llevo ya un ibuprofeno en el cuerpo y cuando me pregunta por mi estado le digo que aunque jodido voy al 100%, a base de ibuprofenos fijo que lo consigo.
Llegamos a un buen tramo para trotar, Ramiro va de lujo, pero yo ya no. Puedo aguantar algo de dolor, pero no consigo trotar un largo rato sin punzadas en la rodilla, duele la planta y con todo esto las ampollas se hacen más difíciles de tolerar.
Mi carrera es cada vez más lenta y veo una luz en el camino... debo de abandonar, aunque me duela, aunque me de rabia, aunque me sienta fuerte y motivado, aunque haya luchado por esto, pero dentro de toda lógica esto es lo más sensato. Se lo comento a Ramiro y en Facheca, tras 23km de duro terreno, y 5h decido abandonar. Animo a Ramiro a que siga y él se debate entre una cosa y la otra, pero al final continua. Nos despedimos hasta las 03'30 cuando tras 19h30' de carrera llega a la meta como un verdadero campeón de campeones.

Ojo a la fila de gente que sube hacia la izquierda.
La tarde la paso en Alcoy, entre granizo, lluvia, rostros desconsolados por el abandono, rostros desencajados por el cansancio, ilusiones de los pocos que consiguen llegar a la meta, abrazos con los colegas que me encuentro donde teníamos que habernos encontrado horas más tarde y con distinto final.

Sección de la carrera, veníamos de collado que se ve a los lejos, a la izquierda del pico vertical.

Han sido muchas las ilusiones que le he puesto a esta aventura, digna de locos e insensatos. Pero lejos de venirme abajo, el domingo por la mañana tengo la motivación por las nubes. He conseguido correr en 5 meses lo que ya pensaba que nunca correría, he mantenido la motivación y la perseverancia durante largos y duros entrenamientos y esto ha dado su fruto, aunque haya tenido la mala suerte de lesionarme el día que no tocaba. Te la juegas a una sola carta y ha salido la que no debía, pero tengo claro que esto no termina aquí, que hay más partidas que jugar, más carreras que correr, más aventuras en las que disfrutar... y estaré ahí para futuras ocasiones!!!

Saludar, reconocer el esfuerzo y la lucha a todos los corredores de la UTMDA y del TMLL. Y agradecer a todos los que me han apoyado durante estos meses, habéis sido muchos y de muy diferentes maneras. A todos gracias.

Pantano de Guadalest al fondo.